La combinación en el Mediterráneo de una serie de valores tan excepcionales en clima y vegetación, potencial agrícola y pesquero, sobre todo, en facilidades de comunicación.
El Mediterráneo, encrucijada entre el continente europeo, África y Oriente próximo, va siendo el destino turístico más importante del mundo. Sus costas reciben más de 30% del total de llegadas de turistas internacionales.
Al principio, el turismo de esta región fue de carácter invernal. Pero el turismo de playa sigue teniendo una importancia notable.
En el decenio de 1980, la aparición de nuevas motivaciones provocó algún cambio. Unos elementos sociales y culturales han afectado los motivos de salida.
Italia, al poseer el 40% del patrimonio cultural mundial, las ciudades artísticas reciben el 29% de los turistas extranjeros contra 27% en el litoral marítimo.
Otros destinos de carácter cultural sigue reforzando esta tendencia. Grecia, Egipto, Marruecos y Turquía van amontonando unos millones de llegadas de turistas extranjeros.
GRECIA: 8 a 9 millones de turistas
TURQUIA: 4 a 6/7 millones de turistas
El Mar Mediterráneo constituye otro gran atractivo para el turismo regional. Queda un destino favorito de los apasionados de balneario.
Allí, tenemos la posibilidad de disfrutar de las playas, del sol y de los atractivos de carácter cultural. Pero el turismo de esta región puede ir más allá de nuestra predilección.
No basta aprovechar de lo que hay por tierra, los cruceros Mediterráneo son muy populares.
Si deseamos un verdadero cambio de aires, embarquemos para realizar al menos uno de los cruceros Mediterráneo. Por este mar tenemos muchas opciones de cruceros como:
Crucero Italia, Grecia, Croacia
Crucero Adriático al completo
Crucero Islas Griegas y Turquí
Crucero Fiordos del Norte desde Malmo
Crucero Italia, Francia, Marruecos, Portugal
Crucero Italia, Francia, Marruecos, Portugal
Por crucero sería ideal optar a una estancia con el régimen de «todo incluido». Los lujosos navíos de compañías especialistas en crucero nos llevarán a descubrir islas maravillosas y ciudades cunas de la civilización occidental.
Dicen que “El que no se arriesga, no pasa la mar”. Entonces por este tipo de viaje vamos a convertirnos en aventureros.
Texto de: Viajesideas.com