El Templo Expiatorio de principal testigo y la plancha de la plaza como escenario fueron dos elementos clave en el éxito del primer Madero Blues, que sin duda, habrá de repetirse.
Cerca de tres horas de blues y jazz a cargo de Los Pájaros Lolos, Fede Teiller y Sandra Vázquez hicieron vibrar a los asistentes.
Además de vivir la música en una de las plazas más representativas de la ciudad, la experiencia del recorrido valía toda la pena: comer en restaurantes de la calle Madero, tomar una nieve en la contra esquina o simplemente disfrutar de la música bajo la lluvia, aunque esto no impidió a los asistentes que siguieran disfrutando del espectáculo.
Vicente Corona Hernández, presidente de la Asociación Nacional Cultural de Música Blues y Jazz y organizador del Salva Blues Jazz Festival Internacional, agradeció a la directora de turismo Gloria Cano por el apoyo en la organización del Festival Madero Blues.