Seguramente has visto – y envidias- a esas personas que pueden dormir de pie, o incluso en las peores condiciones del descanso ¿Cómo lo logran? Te invitamos a practicar algunos consejos que te permitirán conciliar el sueño durante un largo viaje en avión.
Por más cómodo que sea un asiento de avión, es todo un reto disfrutar de un sueño reparador durante los vuelos y más si son largos. Un estudio realizado por Skyscanner descubrió que 79% de los mexicanos entrevistados tiene problemas para dormir a la hora de volar. Por ello, en esta ocasión traemos para ti 5 consejos que puedes aplicar la próxima vez que tomes un avión, y no tengas un boleto de Primera Clase.
1.- Acomoda tu cabeza
A lo largo de tu recorrido por el aeropuerto verás que venden almohadas para viaje: no dudes más y corre por una. Esta maravillosa “u” es de gran ayuda para descansar sin pasar por el embarazoso momento de despertar en el hombro de un perfecto desconocido. Hay personas que bajan la bandeja de comida para recostarse, pero el Dr. Alan Hedge, profesor de ergonomía en la Universidad Cornell, no lo recomienda en lo absoluto, porque es la peor postura imaginable para la espalda baja. Si dejaste la almohada para viajar en el equipaje documentado o simplemente no tienes una, puedes usar tu bufanda o sudadera enrollada para darle soporte a tu cuello.
2.- Acomoda tus piernas
Los vuelos low cost han logrado minimizar los precios, pero también el espacio. Nunca falta la ocasión en la que el pasajero de enfrente coloca algo debajo de su asiento o estás entre dos personas muy altas y simplemente pierdes cualquier posibilidad de mover las piernas. Una manera de evitar esto es viajar en el asiento de la fila que se ubica justo en la salida de emergencia. Estos asientos cuentan con más espacio. Sólo asegúrate de conocer el idioma que la compañía aérea utiliza y de entender las indicaciones en caso de emergencia, de lo contrario te cambiarán de lugar y perderás valioso espacio para tus piernas.
3.- Trata de cansarte
Tomar un vuelo con un poco de agotamiento te ayudará a dormir por lo menos algunas horas: duerme pocas horas antes de tu vuelo, practica alguna actividad física un día antes, desvélate o despierta antes de lo habitual. Tu cuerpo (o tu mente) deseará un poco de descanso y conseguirás conciliar el sueño antes de llegar a la oveja trescientos cuarenta y tres.
4.- Aliméntate sanamente
Tres rebanadas de pizza de pepperoni, tacos al pastor o cualquier otro platillo que altere tu organismo harán muy pesadas tus horas en las nubes. Toma pocos líquidos, consume alimentos que sabes que no le caerán mal a tu cuerpo y viajarás con más probabilidades de tener, por lo menos, un sueño ligero.
- Bloquea la luz y el ruido
Diez por ciento de los viajeros mexicanos admitieron que el ruido suele ser un problema a la hora de dormir. Ocho por ciento de ellos considera molesto el movimiento de los otros pasajeros o la luz de lectura de alguien que no puede dormir porque no leyó estos consejos de Skyscanner.
No olvides poner tus audífonos en tu mochila o bolsa de mano junto con un antifaz para hacer creer a tu mente que es de noche. Los sonidos ambientales de viento o lluvia que puedes descargar en diversas aplicaciones de white noise ayudan a cubrir los ruidos más molestos. Evita utilizar tus dispositivos electrónicos, pues la larga exposición ante estos aparatos afecta el sueño y disminuye tus probabilidades de conseguir una cita con Morfeo.
Bonus: Utiliza siempre el cinturón de seguridad y colócalo de una manera que quede visible para la tripulación para que nadie interrumpa tu codiciado descanso, e incluso pídele al personal de cabina a bordo que no quieres que te despierten para los servicios de comidas o bebidas.