Para quienes damos media vida por una taza de café, seguro daremos la vida entera por un sorbo del Best Macchiato, un exquisito y fino café acompañado con leche; esta inigualable preparación la podemos encontrar en Rococó Café en el corazón de la colonia Condesa en la Ciudad de México.
Visitar Rococó es toda una experiencia, sin duda la original y colorida decoración, invita a pasar y perderse en el aroma y sabor de esta mítica bebida; fiel compañera de solitarios, testigo de enamorados e inspiración de literarios.
Hay para todos los gustos, para los educados y exigentes paladares; hasta para quienes sólo queremos disfrutar de una ‘calientita’ taza de café. La recomendación es acompañarlo también de un delicioso pastel de la casa, por ejemplo el de plátano con nutela o el de naranja con cereza, miel y chocolate… ¿verdad que se te antojó?
La estrella del Rococó es el café mexicano, traído desde los cafetales de Veracruz y Chiapas. Cada grano es tratado como si tuviera vida propia. Para empezar fue seleccionado por un experto catador, de igual manera el tueste consiste en un minucioso método para exaltar su aroma. Luego del proceso anterior, verdaderos baristas, de manera artesana y como si se tratara de una obra de arte, preparan la bebida de tu elección, tan única y especial; que cada sorbo sabe a ti, pues como dicen en Rococó: «es el reflejo de tu alma y muestra tu textura humana».
Después de visitar el Rococó Café de la Condesa, tu percepción sobre esta bebida no puede ser igual. Sin duda sales con un paladar educado en estas artes. Así que si eres amante de esta bebida, la cafetería imperdible está en Parque España esquina con calle Juan de la Barrera.
Ve acompañado para que la plática sepa a café, y si vas solo no dudes en regresar y recomendar este lugar. Así que en tu próxima visita a la Ciudad de México, ve al Rococó y como yo déjate seducir por un café de ‘a de verás’.